Esencia cubana
Pasar una semana en Cuba es una experiencia que marca. Uno llega pensando en playas idílicas, mojitos y ritmo caribeño, pero no es (sólo) eso lo que se encuentra. Al menos, si lo que se pretende no es quedarse en cerrado en un hotel, sino mezclarse con la gente. Y ese, claro, no fue mi plan.
Lo primero que llama la atención de Cuba es que son, por lo menos, dos países. Uno, el oficial, se muestra como un destino paradisíaco para el visitante, habla de sol, playas y música, y de trabajadores honrados que defienden los valores morales de la revolución; el otro, el subterráneo, malvive en la penuria de la falta de casi todo, busca aprovecharse del turista a cualquier precio y ansía el dinero y salir de cualquier modo de la isla. ¿Cómo, si no, se entiende que este Estado tenga dos monedas?
Con Juan, en Playa Ancón, cerca de Trinidad
Ésta, precisamente, es una de las cosas más curiosas del país: hay dos tipos de pesos: los ‘nacionales’ valen muy poco (más o menos, 25 son un dólar) y se supone que son principalmente para los cubanos; y los ‘convertibles’ (CUC), que equivalen más o menos al dólar y se reservan, en principio, a los turistas. Pero hay cosas que sólo se pueden pagar en la moneda «de los extranjeros». Un lío.
En el Capitolio de La Habana
Hay, eso sí, paraísos escondidos, playas inmensas por descubrir a donde todavía no ha llegado la mano de los hoteles. Costas interminables en las que se esconde un chiringuito, donde comer pescado recién cogido por un par de dólares, o donde reposar el daikiri o el mojito bajo una palmera. Hay selva, y carreteras imposibles que pasan por ella, con sus ruidos y sus plantas, y sus tramos sin asfaltar. La Habana es una selva, pero el país es un misterio. Abrasador, pero encantador. Un lugar donde se pueden atravesar autopistas de cuatro carriles con un tractor, donde las bicicletas se mezclan con coches de hace 60 años. Un país donde todos son cultos, y simpáticos, pero la mayoría quieren timarte. Un país casi inventado, atrapado en el tiempo, donde todo es posible. El realismo mágico se inventó en un sitio así.
P.D. Aquí tenéis el enlace al Banco Central de Cuba para comprobar el tipo de cambio del peso cubano convertible (CUC). Para que os hagáis una idea, siempre vale igual que el dólar de EEUU. Consejo fundamental: cambiad siempre en una Cadeca (Casa de cambio), hay en los hoteles y por la calle, y jamás os fiéis de nadie que «consigue un tipo de cambio mejor».
Locodelpelorojo 
Me quedo con tu última frase, nada lo puede resumir mejor. Es un mundo aparte, otra realidad. A mí no dejaban de ofrecerme farlopa por doquier, casi me obligaban a comprar unos gramillos. Pasé miedo en esos momentos. Alguna vez nos timaron y otras veces querían ligar para poder huir de la isla, todo muy rollo Perdidos.
Sí, la verdad es que la desesperación de la gente es bestial, sin poder avanzar, sin poder salir, condenados a lo mismo…. Una paranoia. Bien bonito haber nacido en Europa. ¿Te vienes a mi cumple el jueves, por cierto?
Miguel Angel te has olvidado de hablar de la hospitalidad de parte del pueblo cubano. Sabes por experiencia que ofrecen todo lo que tiene y más. Y que nos consideran hermanos, a pesar de los 7mil kms. que nos separan. Y sabes también que algún hermano cubano es capaz de faltar al trabajo (cosa muy penada allí) por estar compartiendo unas horas con los amigos españoles, ó como cuando otras hermanas cubanas estuvbieron esperando durante 7 horas en el hall del Hotel Presidente a que llegáramos de la Playa de Bocaciega, eso también es de valorar.. Yoi lo denomino calidad humana. y valorar la amistad por encima de todo.
No es que me haya olvidado, es que esta entrada es un pequeño resumen de lo mucho que vivimos allí. No niego el cariño que nos tuvieron, y lo valoro muchísimo, pero tampoco puedo obviar la otra parte del viaje. No te pienses que me traigo la impresión de que es un pueblo de ladrones, ni muchísimo menos, pero sí que fue un viaje un poco duro, porque yo me esperaba que todo el mundo fuera como Ramón, y no es así. No sé, en cualquier caso, al final, cada uno se trae el viaje que ha vivido según su experiencia. ¿Has visto ya las fotos? Muchos besos
Hola Miguel,
He pillado tu blog del Manifiesto. Y, leyendo esto me entran ganas de preguntarte alguna cosilla sobre Cuba. Dime, cómo andan de aliento los cubanos? se respira cambio o no?
un saludo desde Egipto
Sí, pero no. Todo el mundo da por hecho que Fidel Castro ya no está, ni va a estar, y que le va a suceder -que ya lo hace de hecho- su hermano Raúl, pero hay muchas dudas sobre los posibles cambios. Unos apuestan porque el nuevo comandante en jefe sea más duro, otros que va a realizar una tímida apertura, pero la mayoría de la gente con la que hablé cree que se están dando algunas conceciones a la población -móviles, transporte- para que todo siga igual. Yo lo veo poco claro, aunque sí que es posible algún movimiento levemente aperturista a corto plazo.
Uy….quiero más crónicas!
Por lo que deduzco de tus impresiones, las cosas no han cambiado mucho desde que estuve yo, hace ahora tres años, y eso a pesar de la famosa ‘apertura’. Una pena, sobre todo por su gente, que es lo que más me impresionó de Cuba, por la dignidad con que afrontan su lucha diaria por la supervivencia. Y no hablo solo de los círculos turísticos: como tú, pateé la Habana (yo ni siquiera pisé Varadero), fuera de los círculos turísticos, y tuve la ocasión de ir a Matanzas a visitar a familiares lejanos (ya te contaré esa experiencia). Un beso
Pues en breve me voy a hacer un interrail en el que pienso recorrerme el este de Europa. Prometo buena crónica! Eso sí, fotos habrá menos, por eso de que en Cuba me robaron la cámara. Jejejejeejje
Si en tu próximo viaje conoces algún latino o alguna latina que tenga una entrevista de interés humano, las entradas de El chischil (http://el-chischil.blogspot.com) estarán a tu disposición. Salu2 desde Madrid. JL
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A mí la frase que me ha gustado y me parece totalmente cierta (tras mi experiencia por la isla) es la de «un país donde todos son cultos, y simpáticos, pero quieren timarte». Echo de menos mi cámara!!!!
Me ha gustado tu post porque demuestra que estuviste allí para conocer realmente. Yo detesto a los que van a buscar sexo barato(y peligroso a veces) aprovechándose de la situación. Siempre le digo a todos que si algo nos enseñó «El Fifo» fue a luchar por lo que queremos. No comulgo con el comunismo, pues lo aborrecí allí, pero no dejo de entender que, sin la «escuela» del dolor y el sacrificio, no hubiese tenido valor para levantarme aquí. No puedo hablar de política en mi blog porque me ponen a parir los defensores del régimen, pero te digo que aquello tendrá que arreglarse de alguna forma o terminará como «la fiesta del Guatao». El verbo más usado en cuba es «inventar», seguro que lo escuchastes por allá. El pueblo sigue siendo acogedor,pero es cierto que el ingenio está más que aguzado por la necesidad.Pero es lo que queda para los países que se arruuinan por la tozudez de un gobernante que sólo aspira a aparecer en los libros de historia como la bestia negra del imperialismo americano.Esa es su misión personal y a eso ha condenado a los demás. Qué se le va a hacer?: No hay más ná, esto y las tropas. Saludos de una española-cubana.
Sí, la gente es acogedora, pero para llegar a ella tienes que pasar por encima de la capa que los separa de ti, la de la falta de dinero. Estuve también con amigos cubanos de mi padre y son la gente más hospitalaria que he conocido, pero no puedes pensar que todo el mundo va a ser así contigo. La verdad es que a mí la experiencia me marcó mucho. Y sí, «inventamos» todos los días varias veces para salir de todo tipo de situaciones… jejeje Un abrazo
Hola Miguel Ángel
Has captado la esencia de Cuba en este comentario. El país que es una selva, en el que todo el mundo trata de timarte, La Habana y sus calores húmedos, un pais casi inventado con una auopista de ocho carriles por la que van calesas a caballo. El país del realismo mágico, sí señor. Un saludo y mi enhorabuena
Pingback: El poso de 2008 « Locodelpelorojo
yo no creo que el ser de un pais u otro haga a las gentes mejores o peores personas. lo que si es verdad es la frase que dice textualmente «un pais en el que todos son cultos pero todos tratan de timarte» no dudo de la hospitalidad en el caso de que vayas con referencias hacia determinadas personas amigas o familiares, pero en la mayor parte de los casos los que hemos visitado cuba como turistas nos hemos traido la imagen de una realidad que para muchos ha sido distinta de la que pensabamos y es que aunque no dudo del realismo magico, tambien es verdad que o se va «bragao en batallas» (haber viajado mucho y por muchos paises) o quizas la experiencia pueda resultar decepcionante, cuando te das cuenta de que todos muestran una hospitalidad totalmente basada en el interes.
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